10.10.17


                                      ¿HACIA DONDE IREMOS?


Hoy es el día que quizás Puigdemont y Rajoy esperaban que nunca llegara, (o si) después de siete años de unos gobiernos de espalda al otro llega el momento de la catástrofe, ninguno de los dos presidentes tiene muchas salidas. Mientras que aquí en Catalunya se ha estado utilizando los sentimientos de las personas y en muchos casos se ha engañando a los ciudadanos, allí en la Moncloa teníamos un presidente que pensaba que mirando para otro lado se iba a solucionar el problema. Sé que es difícil hablar cuando los dos interlocutores solo tienen un monosílabo como argumento NO. Estoy seguro que muchos catalanes y españoles en general piensan que lo mejor que pudiera pasar es que hoy antes de la seis de la tarde, hora para la que está convocada la sesión de el Parlament, los dos dirigentes dimitieran y se fueran a descansar dejar la agitación y las amenazas y nos volvieran a convocar a la ciudadanía a unas elecciones.
Cada día se descubre cosas nuevas que a los ciudadanos de a pie nos dejan un poco inquietos y helados, policías que no respetan las leyes ni el mandato que les da la justicia, policía que se exceden en su cumplimiento de lo que le manda y luego tienen que pedir perdón a los ciudadanos. Poco importa a estas alturas si la guardia civil descubre e informa que los Mossos estuvieran cuando menos en una actitud pasiva el dia1.O, ya no importa saber si los Mossos no hubieran tenido esa actitud hubiera pasado lo que pasó, lo que parece es que hicieron dejación de sus funciones.
Ya no importa nada de eso, lo que importa es que el parque de la Ciudadela está cerrado a cal y canto y que en las calles que lo rodean habrá cientos, quizás miles de personas de diferentes pensamientos y razones para estar allí, que eso convierte a la zona en una olla a presión que puede explotar con resultados imprevisibles ninguno bueno para el futuro del país y la convivencia de los ciudadanos, si por desgracia hubiera cargas policiales, si hubiera heridos la culpa la volverían a tener las fuerzas de seguridad, los respectivos políticos seguirían discutiendo el viaje a Ítaca.
Será difícil que pase lo que pase no tengamos la sociedad dividida con poca o nula posibilidad a corto plazo de rehacer los vínculos de amistad y familiares rotos, se que dice que esto no está pasando, no hay mas ciego que el que no quiere ver, decía el ministro que propuso la ley del referendo en Canadá que una vez hecho tuvieron que inventarse leyes para tratar de unir la sociedad y facilitar la convivencia.
El máximo culpable de los acontecimiento es Artur Mas que resultó ser un político no demasiado brillante, opaco, que pasará a la historia como el presidente que hizo los mayores recortes en políticas sociales, que pactó con el PP las leyes más retrogradas para los catalanes, fue el presidente que no hizo absolutamente nada en seis años y que permitió que diez diputados absolutamente opuestos a sus ideología e intereses lo depusieran.
Estamos viendo en esta semana como en teoría la comunidad de Catalunya se está empobreciendo, los dos bancos catalanes han cambiado sus sedes sociales también numerosas empresas y las que lo harán en días sucesivos.
Ayer La Vanguardia decía muchas de las empresas que huyeron de Quebec nunca más volvieron, al mediodía las televisiones mostraban a la gente haciendo cola en las cajas y los bancos de la franja de Catalunya  y Aragón, decían algunos que las cajas se quedaron sin dinero pero que estaba dispuestos a volver al día siguiente.


Puigdemont, Junqueras, Forcadell y Rajoy no se merecen ni un gramo de estima de los ciudadanos, han demostrado que son incapaces de gestionar la política sin hacer daño a los pueblos, no se merecen seguir ni un minuto más en sus cargos. Nosotros los ciudadanos también tendríamos que pensarnos si nos merecemos este trato o democráticamente con nuestro voto los enviamos al retiro de una puñetera vez 

Salud

No hay comentarios: